Milagros De Camps Germán presenta querella por campaña injuriosa y difamatoria en redes sociales

Santo Domingo. — Milagros De Camps Germán interpuso una querella contra Ángel Ramón De Jesús Martínez Jiménez (conocido como «Detective Ángel»), así como otros usuarios alegando difamación e injuria.
La acción fue presentada ante la Procuraduría Fiscal del Distrito Nacional, en el marco de un conjunto de acciones legales iniciadas el 24 de enero del año en curso.
La querella, suscrita por los abogados Amauris Vásquez Disla, Diana De Camps Contreras, Paul Concepción, Mariela Santos Jiménez y Félix M. Santana Reyes acusa a los imputados de la comisión de los delitos de difamación e injuria agravada, establecidos en los artículos 367 y siguientes del Código Penal, así como en la Ley 61-32 sobre Expresión y Difusión del Pensamiento y la Ley 53-07 sobre Crímenes y Delitos de Alta Tecnología.
Difamación sistemática y viralización
La acusación se fundamenta en una serie de publicaciones y videos difundidos en redes sociales que violentan el derecho a la dignidad humana e integridad. Según la querella, la narrativa fue amplificada con lenguaje burlón, imágenes manipuladas y afirmaciones ajenas a la verdad, en lo que la parte accionante describe como una campaña de difamación sistemática y viral.
La demanda incluye la solicitud de una indemnización ascendente a RD$10,000,000.00, a ser destinada a la protección y conservación del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SINAP).
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Delito digital en el centro del debate
La querella destaca cómo las redes sociales, lejos de ser «territorios sin ley«, deben responder al marco jurídico vigente. Citando precedentes del Tribunal Constitucional dominicano y jurisprudencia comparada, los abogados sostienen que las expresiones proferidas no están amparadas por el derecho a la libertad de expresión, al tratarse de imputaciones falsas, ultrajantes y ofensivas.
“Este caso representa un ejemplo claro del uso malintencionado de la libertad de expresión, donde el pensamiento no es el motor de las declaraciones, sino el odio, la manipulación y el descrédito”, señala el escrito introductorio.
Una querella en medio de un debate nacional
La discusión ha avivado un necesario diálogo sobre el equilibrio entre el derecho a expresarse y el deber de respetar la dignidad ajena, especialmente en la era de las redes sociales, donde una afirmación infundada puede replicarse exponencialmente en cuestión de minutos.